Seguridad de los periodistas
El PIDC cumple una función fundamental en el seguimiento de la seguridad de los periodistas y la prevención de la impunidad de los que cometen crímenes contra ellos. Para aplicar cabalmente el derecho a la libertad de opinión y expresión, resulta esencial garantizar a los profesionales de los medios de comunicación el derecho de trabajar sin verse amenazados por la violencia. El Estado y la sociedad tienen el deber de crear y mantener las condiciones necesarias para que todos puedan gozar de esos derechos humanos fundamentales.
Antecedentes
El Director General de la UNESCO condenó por primera vez los asesinatos de periodistas en 1997, enconformidad con la Resolución 29 aprobada por la Conferencia General de la Organización en la que se insta a las autoridades competentes a cumplir con su deber de prevenir, investigar y sancionar crímenes que restrinjan la libertad de expresión y el derecho de los demás a recibir información, y a subsanar sus consecuencias.
En 2006, la seguridad de los periodistas fue el tema de un debate temático organizado durante la 25ª reunión del Consejo Intergubernamental del PIDC. Dos años después, el Director General de la UNESCO presentó el primer informe sobre la seguridad de los periodistas y el riesgo de la impunidad al Consejo Intergubernamental del PIDC en su 26ª reunión, como continuación del debate temático.
En esta reunión, el Consejo aprobó una decisión sobre la seguridad de los periodistas y la cuestión de la impunidad, que asigna al PIDC un papel central en el seguimiento de los asesinatos condenados por el Director General de la UNESCO. En esta Decisión se insta a los Estados Miembros a “cumplir las obligaciones que les impone el derecho internacional de poner fin a la impunidad” e “informar al Director General de la UNESCO, con carácter voluntario, de las medidas adoptadas para evitar la impunidad de sus autores y comunicarle la situación de las investigaciones judiciales que se lleven a cabo sobre cada asesinato condenado por la UNESCO”.
Desde entonces, el Director General de la UNESCO presenta cada dos años al Consejo del PIDC un informe sobre la seguridad de los periodistas y el riesgo de la impunidad, que constituye una herramienta de seguimiento.
El asesinato constante de periodistas es una realidad inquietante
El Informe de la Directora-General de la UNESCO al Comité Intergubernamental del PIDC sobre la Seguridad de Los Periodistas y el Peligro de la Impunidad fue presentado ante el Consejo del PIDC en su 29ª sesión, la cual tuvo lugar en París los días 20 y 21 de noviembre de 2014. El Informe presenta un análisis de los asesinatos de periodistas condenados por la Directora-General de la UNESCO entre el 1 de enero del 2006 y el 31 de diciembre del 2013, y ofrece información relativa a la labor realizada por la UNESCO en este campo.
El Informe revela que en dicho periodo entre 2006 y 2013 se han documentado un total de 593 casos de periodistas asesinados (sean periodistas, trabajadores de medios de comunicación o individuos activos en las redes sociales que generen contenido de interés periodístico para el público). Esos fueron, además, condenados por la Directora-General de la UNESCO, Irina Bokova. Esto supone una media de un periodista asesinado por semana. Los medios ‘tradicionales’ fueron los más afectados por este tipo de ataques: 244 periodistas de prensa escrita fueron asesinados (41% del total), seguidos por los periodistas de medios televisivos con 154 asesinatos (26% del total) y los periodistas de radio, con 123 asesinados (21% del total). Una muy amplia mayoría de los periodistas afectados fueron corresponsales locales (94% de los casos), así como varones (94% de los casos). El Informe indica, sin embargo, que las mujeres periodistas sufren riesgos específicos que no se reflejan en las estadísticas de ataques mortales, los cuales incluyen acosos y ataques sexuales.
El Informe ofrece, además, una actualización acumulativa de los 593 asesinatos de periodistas documentados, para la cual la Directora-General de la UNESCO había solicitado información relativa a los procesos judiciales ligados a estos asesinatos a los respectivos Estados Miembros de la UNESCO. La UNESCO tan sólo fue notificada de la resolución judicial de 39 casos, los cuales representan un 6,6% del total. La UNESCO fue informada, además, de 172 casos en los cuales se estaba llevando a cabo procedimientos judiciales, lo que representa un 29% de los asesinatos. En una reciente declaración, la Directora-General de la UNESCO, Irina Bokova, señaló que esta situación “no puede seguir así” y realizó un llamamiento a que todos los gobiernos se muestren más firmemente comprometidos con la justicia por los periodistas asesinados y a que mantengan informada a la UNESCO de manera voluntaria de los procesos judiciales relativos a estos crímenes.
En 2010, el Consejo del PIDC aprobó por unanimidad una segunda Decisión sobre la Seguridad de los Periodistas y la Cuestión de la Impunidad, en la que insta de nuevo a los gobiernos a que informen a la Directora-General de la UNESCO sobre las investigaciones de los asesinatos de periodistas asesinados. En la Decisión se pide también a la Conferencia General de la Organización que invite a las salas de redacción del mundo a guardar un minuto de silencio cada año el Día Mundial de la Libertad de Prensa (3 de mayo) para condenar los asesinatos de periodistas.
La UNESCO actualmente lidera el Plan de Acción de las Naciones Unidas sobre la Seguridad de los Periodistas y la Cuestión de la Impunidad. Este Plan de Acción, el cual fue avalado por la Junta de Coordinación de Jefes Ejecutivos de las Naciones Unidas en 2012, busca reforzar la seguridad de periodistas en todo el mundo y luchar contra la impunidad de los crímenes sufridos por estos.
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