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Mensaje del Secretario General con motivo del Día Mundial de la Justicia Social

20 de febrero de 2009

La justicia social es un principio fundamental para la coexistencia pacífica y próspera, tanto dentro de las naciones como entre ellas. Defendemos los principios de justicia social cuando promovemos la igualdad entre los géneros o los derechos de los pueblos indígenas y los migrantes. Favorecemos la justicia social cuando suprimimos los obstáculos que encara la gente por motivos de género, edad, raza, etnia, religión, cultura o discapacidad.

Para las Naciones Unidas, la consecución de la justicia social universal constituye uno de los ejes centrales de nuestro cometido de promover el desarrollo y la dignidad humana en todo el mundo. La aprobación, el año pasado, de la Declaración sobre la justicia social para una globalización equitativa por la Organización Internacional del Trabajo no es sino un ejemplo reciente del compromiso que el sistema de las Naciones Unidas ha asumido para con la justicia social. La Declaración se centra en el logro de unos resultados equitativos para todos mediante el empleo, la protección social, el diálogo social y los principios y derechos fundamentales en el trabajo.

Lamentablemente, la justicia social sigue siendo un sueño difícil de alcanzar para la abrumadora mayoría de la humanidad. La pobreza extrema, el hambre, la discriminación y la negación de los derechos humanos siguen marcando nuestro panorama moral. La crisis financiera mundial amenaza con empeorar aún más estos males.

Este año se conmemora por primera vez el Día Mundial de la Justicia Social proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2007. Con esta conmemoración se pretende subrayar la importancia de la justicia social como imperativo ético que ha de regir toda nuestra labor.

La estabilidad y prosperidad mundiales dependen de que las personas disfruten efectivamente de unos niveles aceptables de bienestar e igualdad de oportunidades. La falta de justicia social universal debería constituir una afrenta para todos nosotros. Con motivo de esta conmemoración inaugural, reafirmemos nuestra adhesión a los principios de la justicia social y a la búsqueda enérgica de estrategias y políticas que permitan conseguirla.