La violencia sexual: un instrumento de guerra
«La violencia sexual en los conflictos debe considerarse como el crimen de guerra que es; ya no puede considerarse como un daño colateral desafortunado de las guerras»Zainab Hawa Bangura,
Representante Especial de las Naciones Unidas sobre la violencia sexual en los conflictos, 2012
Es mucho más probable que las víctimas de un conflicto armado moderno sean civiles y no soldados. Según la Iniciativa de las Naciones Unidas contra la violencia sexual en los conflictos armados , la inmensa mayoría de las víctimas de las guerras de nuestros días son civiles, principalmente mujeres y niños. Las mujeres en particular pueden enfrentar formas devastadoras de violencia sexual, que se aplican a veces sistemáticamente para lograr objetivos militares o políticos.
Las violaciones cometidas durante la guerra suele tener la intención de aterrorizar a la población, causar rupturas en las familias, destruir a las comunidades y, en algunos casos, cambiar la composición étnica de la siguiente generación. A veces se utiliza también para infectar deliberadamente a las mujeres por VIH o causar la infecundidad entre las mujeres de la comunidad que se pretende destruir.
En Rwanda, entre 100.000 y 250.000 mujeres fueron violadas durante los tres meses de genocidio en 1994.
Los organismos de las Naciones Unidas calculan que más de 60.000 mujeres fueron violadas durante la guerra civil en Sierra Leona (1991-2002), más de 40.000 en Liberia (1989-2003), hasta unas 60.000 en la ex Yugoslavia (1992-1995) y al menos 200.000 en la República Democrática del Congo desde 1998.
Incluso después de que concluyera el conflicto, persisten los efectos de la violencia sexual en la forma de embarazos no deseados, enfermedades de transmisión sexual y estigmatización. La violencia sexual generalizada de por sí puede continuar o incluso incrementarse después de un conflicto como consecuencia de la inseguridad y la impunidad. Y para atender a las necesidades de los sobrevivientes, que incluyen atención médica, tratamiento del VIH, apoyo psicológico, asistencia económica y las vías jurídicas de reparación, hacen falta recursos que no tienen muchos de los países que acaban de salir de un conflicto.
Reconocimiento de la violencia sexual como delito internacional
Durante siglos, la violencia sexual en los conflictos se aceptaba tácitamente como inevitable. Un informe de las Naciones Unidas de 1998 sobre la violencia sexual y los conflictos armados señala que, históricamente, los ejércitos consideraban la violación uno de los botines de guerra legítimos. Durante la segunda guerra mundial, todas las partes en el conflicto fueron acusadas de violaciones masivas, sin embargo ninguno de los dos tribunales establecidos por los países aliados vencedores para enjuiciar presuntos crímenes de guerra, el de Tokio y el de Nuremberg, reconoció el delito de violencia sexual.
No fue hasta 1992, ante la generalización de la violación de mujeres en la ex Yugoslavia, que la cuestión fue señalada a la atención del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. El 18 de diciembre de 1992, el Consejo declaró que «las detenciones y las violaciones sistemáticas, masivas y organizadas de mujeres, en particular mujeres musulmanas, en Bosnia y Herzegovina» era un delito internacional que debía abordarse.
Posteriormente, en el Estatuto del Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (ICTY, 1993) se incluyó la violación como crimen de lesa humanidad, junto con otros delitos como la tortura y el exterminio, cuando se cometen en conflictos armados y van dirigidos contra una población civil. En 2001, el ICTY se convirtió en el primer tribunal internacional que halló culpable a un acusado de violación como crimen de lesa humanidad. Además, el Tribunal amplió la definición de esclavitud como crimen de lesa humanidad para incluir la esclavitud sexual. Con anterioridad, el trabajo forzoso era el único tipo de esclavitud considerado crimen de lesa humanidad.
El Tribunal Penal Internacional para Rwanda (ICTR, 1994) declaró también que la violación era un crimen de guerra y de lesa humanidad. En 1998, el ICTR se convirtió en el primer tribunal internacional que halló culpable a un acusado de cometer violación como crimen de genocidio (utilizado para perpetrar el genocidio): En el juicio contra un ex alcalde, Jean-Paul Akayesu, se determinó que la violación y el asalto sexual constituían actos de genocidio por cuanto se habían cometido con la intención de destruir, en su totalidad o en parte, al grupo étnico tutsi.
En el Estatuto de Roma del Tribunal Penal Internacional , que funciona desde julio de 2002, se entiende por crimen de lesa humanidad la violación, la esclavitud sexual, la prostitución forzada, el embarazo forzado, la esterilización forzada u «otros abusos sexuales de gravedad comparable» cuando se cometa como parte de un ataque generalizado o sistemático. Las órdenes de detención emitidas por el Tribunal Penal Internacional incluyen varios cargos de violación como crimen de guerra y crimen de lesa humanidad.
A pesar de que los cambios en las leyes nacionales e internacionales constituyen importantes pasos de avance para castigar y erradicar la violencia sexual, su éxito será imposible de lograr sin un cambio radical en la actitud de las personas hacia el abuso sexual de las mujeres.
«En estos momentos, la mujer que es violada es estigmatizada y excluida por esa razón», dice el Dr. Denis Mukwege Mukengere, director del hospital Panzi en Bukavu (República Democrática del Congo). «Leyes aparte, tenemos que lograr que la sanción social sea favorable a la mujer. Tenemos que llegar a un punto en que la víctima reciba el apoyo de la comunidad y el violador sea estigmatizado, excluido y castigado por toda la comunidad».
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha hecho mucho en los últimos años para ayudar a crear conciencia y desencadenar la acción contra la violencia sexual en los conflictos:
- En la resolución 1325 (2000) del Consejo de Seguridad instó a los Estados Miembros a que velasen por que aumentara la participación de la mujer en la «prevención y solución de conflictos» y en el «mantenimiento y la promoción de la paz y la seguridad». En la resolución se pedía a las partes en un conflicto armado que cumplan los tratados internacionales que protegen los derechos civiles de las mujeres y las niñas e incorporen las políticas y procedimientos que protegen a las mujeres de delitos por motivo de género, como la violación y la agresión sexual.
- En la resolución 1820 (2008) del Consejo de Seguridad se exige que se ponga fin a todos los actos brutales de uso de la violencia sexual contra las mujeres y las niñas como táctica de guerra y a la impunidad de los perpetradores. Se pedía al Secretario General y a las Naciones Unidas que brindara protección a las mujeres y a las niñas en los esfuerzos por lograr la seguridad encabezados por las Naciones Unidas, incluso en los campamentos de refugiados, e invitaran a las mujeres a participar en todos los aspectos del proceso de paz.
- En la resolución 1888 (2009) del Consejo de Seguridad se detallaban las medidas para seguir protegiendo a las mujeres y a los niños de la violencia sexual en situaciones de conflicto, como pedir al Secretario General que nombrara un representante especial encargado de dirigir y coordinar la labor de las Naciones Unidas al respecto, enviase un equipo de expertos para examinar situaciones de interés particular y otorgara al personal de mantenimiento de la paz el mandato de proteger a las mujeres y a los niños.
- La resolución 1889 (2009) del Consejo de Seguridad reafirmó la resolución 1325, se condenó la violencia sexual constante contra las mujeres en situaciones de conflicto e instó a los Estados Miembros de las Naciones Unidas y la sociedad civil a que consideraran la necesidad de protección de la mujer y las niñas y de su empoderamiento, incluidas las que estuviesen relacionadas con grupos armados, en la programación posterior a los conflictos.
- En la resolución 1960 (2010) del Consejo de Seguridad se pidió al Secretario General que incluyese información detallada de las partes sobre las que pesaran sospechas fundadas de haber cometido o ser responsables de actos de violencia sexual en situaciones sometidas al examen del Consejo También se pidió el establecimiento de disposiciones sobre vigilancia, análisis y presentación de informes sobre la violencia sexual relacionada con los conflictos.
- La resolución 2106 (2013) del Consejo de Seguridad está dirigida a fortalecer la vigilancia y la prevención de la violencia sexual en los conflictos.
- La resolución 2122 (2013) del Consejo de Seguridad reiteró la importancia de la participación de las mujeres en la prevención y la resolución de los conflictos, y en la construcción de la paz.
Iniciativa de las Naciones Unidas
En 2007, la actividad de diversos organismos de las Naciones Unidas para luchar contra la violencia sexual quedó agrupada en una sola: la Iniciativa de las Naciones Unidas contra la violencia sexual en los conflictos armados , que unificó la labor de 13 organismos de las Naciones Unidas. Se trata de un esfuerzo concertado del sistema de las Naciones Unidas para mejorar la coordinación y la rendición de cuentas, ampliar la programación y la labor de promoción y apoyar los esfuerzos de los países para prevenir la violencia sexual y responder con eficacia a las necesidades de los sobrevivientes.
La Iniciativa de las Naciones Unidas ha apoyado, por ejemplo, el diseño y la aplicación de la Estrategia general de lucha contra la violencia sexual en la República Democrática del Congo , que no tiene precedentes, así como del Programa conjunto del Gobierno y las Naciones Unidas sobre la violencia sexual en Liberia.
Financiada por el Organismo de ayuda del Gobierno de Australia (AusAID), la Iniciativa de las Naciones Unidas ha documentado también, junto con el Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz y la Representante Especial del Secretario General sobre la violencia sexual en los conflictos , las mejores prácticas de mantenimiento de la paz en la búsqueda de soluciones a la violencia sexual relacionada con los conflictos. Desde iniciar patrullas para proteger a las recolectoras de leña en Darfur hasta establecer escoltas para ir al mercado, patrullas nocturnas y sistemas de alerta anticipada en la República Democrática del Congo, el Inventario analítico de la práctica del mantenimiento de la paz constituye un catálogo de los esfuerzos directos e indirectos para luchar contra la violencia sexual durante la guerra y después de la guerra.
Unidos para poner fin a la violencia contra las mujeres
En 2008, el Secretario General Ban Ki-moon lanzó Unidos para poner fin a la violencia contra las mujeres: campaña para prevenir y eliminar la violencia contra las mujeres y las niñas en todas partes del mundo, en tiempo de paz y de guerra. La campaña reúne a un conjunto de organismos de las Naciones Unidas y aúna fuerzas con particulares, la sociedad civil y los gobiernos para poner fin a la violencia contra las mujeres en todas sus formas.
La Representante Especial del Secretario General
En 2010, tras la aprobación de la resolución 1888 del Consejo de Seguridad , el Secretario General nombró a Margot Wallström Representante Especial del Secretario General sobre la violencia sexual en los conflictos. Le sucedió en septiembre de 2012, Zainab Hawa Bangura. La función de la Representante Especial es proporcionar dirección coherente y estratégica y promover la cooperación y la coordinación por medio de la Iniciativa de las Naciones Unidas.
Cuando asumió sus funciones, la Sra. Bangura, ex ministra de Sanidad de Sierra Leona, definió las seis prioridades de su mandato:
- poner fin a la impunidad de los responsables y buscar justicia para las víctimas
- proteger y empoderar a la población civil que se enfrenta a la violencia sexual en los conflictos, en particular a las mujeres y niñas, principales víctimas de estos crímenes.
- movilizar a los dirigentes políticos sobre esta cuestión
- reforzar la coordinación y asegurar una respuesta más coherente del sistema de Naciones Unidas
- aumentar el reconocimiento de la violencia sexual como táctica y consecuencia de los conflictos; y
- resaltar la responsabilidad nacional y el liderazgo en la lucha para acabar con este flagelo.
Informe Anual del Secretario General
El último informe del Secretario General sobre violencia sexual en los conflictos se presentó al Consejo de Seguridad el 14 de marzo de 2013. En el informe se revisan 22 zonas de conflicto, entre las que se incluye Malí por primera vez, y se presenta información acerca de las partes que conflicto sospechosas de haber cometido, o de ser responsables, de violaciones u otras formas de violencia sexual. El informe también insiste en la urgencia de garantizar que las cuestiones relativas a la violencia sexual se incluyan, de forma explícita y sistemática, en los procesos y los acuerdos de paz, en la reforma del sector de la seguridad y en las fases de desarme, desmovilización y reintegración en las que participe la ONU.
El informe de 2012, «Violencia sexual relacionada con los conflictos: informe del Secretario General », cita por su nombre y por primera vez algunas de las fuerzas militares, milicias y otros grupos armados de los que se sospecha que han sido los peores transgresores. Los grupos enumerados en el informe son el Ejército de Resistencia del Señor en la República Centroafricana y en el Sudán del Sur, los grupos armados de la milicia y las antiguas fuerzas armadas de Côte d’Ivoire y grupos armados y elementos de las fuerzas armadas de la República Democrática del Congo.
El informe también ofrece ejemplos de la manera en que la violencia sexual ha amenazado la seguridad e impedido establecer la paz en situaciones posteriores a los conflictos como en el Chad, la República Centroafricana, el Nepal, Sri Lanka, Timor-Leste, Liberia, Sierra Leona y Bosnia y Herzegovina, y cómo se le ha utilizado en el contexto de las elecciones, las contiendas políticas y alteraciones del orden en Egipto, Guinea, Kenya y Syria, entre otros.
Para más información, visite:
La Oficina del Representante Especial del Secretario General sobre la violencia sexual en los conflictos:
www.stoprapenow.org
UNETE para terminar con la violencia contra las mujeres:
www.un.org/es/women/endviolence
Programa de divulgación sobre el genocidio en Rwanda y las Naciones Unidas:
www.un.org/es/preventgenocide/rwanda
Publicado por el Departamento de Información Pública. Marzo 2014.