“Las informaciones sobre los daños causados por el sismo son estremecedoras”, declaró. “Expreso mi preocupación y mi sincera compasión por el pueblo hatiano y me comprometo a que nuestra Organización haga cuanto esté en su mano en sus ámbitos de competencia para ayudar a la población a hacer frente a este terrible suceso”.
“Espero también con ansiedad noticias del equipo de la oficina de la UNESCO en Puerto Príncipe”, añadió.
La UNESCO, que tiene una oficina en la capital haitana, sigue de cerca la situación en Haití y trabaja con la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCAH) para dar a la situación una respuesta lo más rápida y eficaz posible.
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