La temática de calidad de educación debe enraizarse en la ampliación del concepto de alfabetización. Es decir, el umbral básico de dominio que todos los ciudadanos deben tener de determinados códigos para poder funcionar en una sociedad del conocimiento. El concepto tradicional de alfabetización como manejo de lectoescritura debe ampliarse e incluir la alfabetización digital y científica.

Una ciudadanía activa demanda el manejo de temáticas como el medio ambiente, la salud, la economía. Por ello, la universalización del acceso del uso de la computadora, es un comienzo que debe proyectarse con un horizonte de mejora de la calidad educativa.

Esta visión ampliada del alfabetismo que algunos llaman funcional implica importantes cambios que pasan por el reconocimiento de la diversidad y la importancia de la inclusión en el sistema educativo. Como la capacidad de demanda de los ciudadanos se encuentra desigualmente distribuida, y la educación es un bien público, es indispensable que las políticas públicas identifiquen las necesidades y planifiquen para avanzar en la construcción de una educación de calidad base de una sociedad del conocimiento.

En ese sentido, el Sector de Educación de la Oficina de Montevideo trabajando en los senderos de indagación, las comunidades de práctica que emergen de los proyectos territorialmente situados, acompañando la máxima de aprender a lo largo de la vida en las diferentes acciones de los Estados busca acompañar y apoyar la identificación de una mirada inclusiva de la alfabetización, la calidad de la educación con el reconocimiento de las diferencias y la agenda post 2015.