En momentos en que los esfuerzos de rescate de emergencia son la primera prioridad, la UNESCO está preparando un plan de acción para intervenir rápidamente en la reactivación del sistema educativo. La destrucción de la universidad de Puerto Príncipe y de numerosas escuelas primarias y secundarias en el terremoto del martes, así como el fallecimiento de profesores y estudiantes es un golpe catastrófico para un país ya asolado por otros desastres.
“La educación es clave para la recuperación de Haití, y fundamental para el desarrollo del país. Estamos decididos a movilizar ayuda para construir instalaciones educativas de emergencia y para reconstruir las que se han derrumbado. Pido también al mundo académico que muestre su solidaridad. Las universidades de la región y de otros lugares del mundo deben hacer cuanto esté en su mano para ayudar a los estudiantes haitianos”, agregó Bokova. La Directora General enviará a Haití a un enviado especial con mucha experiencia, Bernard Hadjadj, con objeto de evaluar las necesidades más inmediatas.
Por otra parte, todos los organismos de Naciones Unidas trabajan en estrecha coordinación para diseñar un programa de asistencia común y consolidado. En este marco, la UNESCO obrará por que la educación reciba una prioridad que estima importantísima para la recuperación del país tras la catástrofe. Entre las iniciativas propuestas por la UNESCO figura el apoyo psicosocial a los estudiantes y docentes del país y ayuda de emergencia para las autoridades educativas nacionales.