Isla sagrada de Okinoshima y sitios asociados de la región de Munakata
Situado a unos 60 km de la costa occidental de la isla de Kyushu, el sitio de Okinoshima es un ejemplo excepcional de la práctica ancestral de venerar islas consideradas sagradas. Los vestigios arqueológicos de esta pequeña isla se han conservado prácticamente intactos y ofrecen una visión cronológica de la evolución de los ritos religiosos practicados en ella desde el siglo IV al IX de nuestra era. Durante las ceremonias celebradas, se depositaban en ofrenda objetos votivos en distintos parajes de la isla. La primorosa ejecución de muchos de esos objetos y su procedencia ultramarina atestiguan la existencia de intercambios intensos entre el archipiélago japonés, la península coreana y el continente asiático. Perteneciente al gran santuario de Munakata, la isla de Okinoshima se sigue considerando sagrada.