Se espera que la educación responda de forma continua a los cambios en las necesidades de desarrollo de la sociedad. Esto podría significar cambios sistemáticos rápidos al currículo en respuesta a los desafíos de desarrollo nacionales, regionales y mundiales. Muchos países tienen dificultades para ajustar, e incluso reformar, adecuadamente los currículos para adaptarse a los rápidos cambios. Normalmente, el resultado son enfoques e intervenciones especiales y poco sistemáticos que no vinculan efectivamente elementos críticos del sistema educativo con los procesos de cambio y reforma del currículo.
El objetivo de nuestro trabajo es apoyar a los países a incorporar de manera efectiva temas críticos y actuales en los procesos de cambio e innovación curricular en todos los niveles, entornos y disposiciones del sistema educativo.