La UNESCO publica una guía para que padres y madres dispongan de un material de consulta que contempla aspectos físicos y psicológicos de sus hijos, traducida al español, inglés, portugues y francés
La pandemia de COVID-19 ha implicado que las personas de todas partes del mundo pasen más tiempo en sus casas. Pero no todas las personas atraviesan la crisis de la misma manera. El estress y la angustia pueden verse incrementados en aquellos hogares donde hay familiares en situación de discapacidad.
Personas que cuidan niñas, niños y adolescentes con alguna limitación psicosocial, en situación de discapacidad y/o de comportamiento, viven un momento particularmente complejo. El referirse al cuidado de una hija o hijo implica la atención permanente, incluyendo los espacios que se destinan para que reciban una educación integral hablando desde la cultura, recreación, deporte o activación física; en una hija o hijo en situación de discapacidad se vive de la misma manera, sin embargo se requiere hacer énfasis en generar un entorno adecuado a las habilidades y necesidades para el óptimo desarrollo en su crecimiento.
Los cambios radicales y el consiguiente estrés que provoca COVID-19 y el bloqueo de la vida de las personas también pueden dar lugar a diferentes tipos de dificultades entre los niños con discapacidad. Por lo tanto, sus padres y cuidadores deben saber cómo tratarlos y guiarlos durante esta pandemia
Frente a esta situación, y con la visión de prestar más apoyo a los niños y niñas con discapacidad y a sus comunidades, la UNESCO junto con la Cátedra UNESCO de Gestión Comunitaria de la Discapacidad (Universidad de Calicut) han elaborado conjuntamente una guía para compartir con los familiares de personas con diferentes tipos de discapacidad, para que dispongan de este material para enfrentar la cuarentena en el marco del Covid-19.
La guía trata once áreas de atención y presenta herramientas para controlar el estrés. Estas son: la limpieza, hábitos alimenticios y salud, rutina de ejercicios, dormir, medicinas, además de aprender nuevas habilidades, responsabilidades/deberes, entretenimiento. También contempla aspectos conductuales asociados a la discapacidad y, por último, bienestar psicológico, fisiológico y emocional de las personas a cargo.