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Construir la paz en la mente de los hombres y de las mujeres

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La fiebre del jazz en los suburbios negros de Sudáfrica

Las cantantes Abigail Kubeka, Thandi Klaasen, Dolly Rathebe y Mara Louw interpretando en 1998 canciones de los años 1950 durante una conmemoración de la ominosa destrucción de la barriada multirracial de Sophiatown (Johannesburgo), decretada en 1955 por el régimen segregacionista sudafricano.

Fotos: Jürgen Schadeberg

Texto: Katerina Markelova, UNESCO

Autor de una crónica en imágenes del apartheid, el fotorreportero Jürgen Schadeberg (1931-2020) captó también con su cámara momentos culminantes de la historia del jazz sudafricano*. Fruto del encuentro de este excepcional artista con el efervescente y protestatario universo musical de los jazzistas de Sudáfrica fue una serie de instantáneas de gran riqueza, autenticidad y valía documental e histórica. 

En 1950, a los 19 años, Schadeberg huye de Alemania y de su pasado nazi. Pero el país donde decidió establecerse, la entonces Unión Sudafricana, acababa de implantar un régimen de segregación racial total: el apartheid. En Sophiatown (Johannesburgo) y en otros suburbios donde se iban concentrando las poblaciones negras expulsadas paulatinamente del centro de las ciudades, el joven fotógrafo trabó amistad con toda una joven generación de músicos negros –autodidactas en su gran mayoría– que con un nuevo estilo inimitable habían empezado a ocupar el proscenio del jazz autóctono, con los ojos siempre puestos en el lejano Manhattan. Schadeberg dirá años después que “el jazz estadounidense, adaptado y africanizado, iba cobrando en Sudáfrica la tonalidad única de estos suburbios”. En estas barriadas populares dieron sus primeros pasos artísticos muchas futuras estrellas mundiales del jazz, como la cantante Miriam Makeba, el trompetista Hugh Masekela y el pianista Abdullah Ibrahim. Forzados a exilarse a países de Europa y a Estados Unidos, muchos de estos intérpretes pusieron su talento y fama al servicio de una lucha sin tregua contra el apartheid

Jürgen Schadeberg captó con el objetivo de su cámara el espíritu de toda una época de Sudáfrica, las aspiraciones de su población y el combate contra la segregación racial. Esto le valió ser arrestado en varias ocasiones y más tarde, en 1964, se vio obligado a emprender el camino del exilio. A Schadeberg se le considera el padre de la fotografía sudafricana. En el decenio de 1950 formó a toda una generación de fotorreporteros sudafricanos, en su calidad de director artístico de Drum [Tambor], la revista cultural de las comunidades negras urbanas de ese país. 

“El jazz encarna la libertad, justamente porque sus raíces emanan de la esclavitud”, declaró Herbie Hancock, leyenda del jazz e iniciador del Día Internacional del Jazz, en un número especial del Correo en 2012. Esta jornada, proclamada en 2011 por la UNESCO, celebra anualmente, cada 30 de abril, los valores universales de este estilo surgido a principios del siglo XX en el sur de Estados Unidos.

 

Año 1954, Hugh Masekela es el adolescente que contempla con sus compañeros de la banda de jazz Huddleston el instrumento que le ha regalado Louis Armstrong. Con el correr del tiempo, Hugh llegó a ser uno de los trompetistas de jazz más famosos del mundo.

Año1962, el trompetista Mongezi Feza y el saxofonista Dudu Pukwana del célebre sexteto Blue Notes durante una sesión de jazz en un sótano del barrio de Hillbrow (Johannesburgo).

Fundador en 1959 de Jazz Epistles, el grupo de bebop más importante de Sudáfrica, el afamado pianista Abdullah Ibrahim tuvo que exilarse a Nueva York en el decenio de 1960. En esta foto de 1979, le vemos tocando en la boda de un amigo celebrada en esta ciudad.

Formada en el arte del bel canto en el Technikon de Pretoria, Gloria Bosman es una de las figuras más importantes de la nueva generación de jazzistas de Sudáfrica, 2001.

*Jazz, Blues & Swing: Six Decades of Music in South Africa [Jazz, Blues y Swing – Seis decenios de música en Sudáfrica]. Libro de fotografías de Jürgen Schadeberg con textos de Don Albert, Gwen Ansell, Darius Brubeck y Hotep Idris Galeta (David Philip Publishers, Claremont, 2007).