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Un parque sostenible en Costa Rica ayuda a las comunidades a salir de la pobreza extrema

08/01/2020

Un parque sostenible e inclusivo en Costa Rica ha dado nuevas esperanzas y perspectivas a las personas que viven en condiciones sociales y ambientales de una pobreza extrema.

El Parque La Libertad, de 32 hectáreas, ubicado al sureste de la capital San José, en Patarrá (Costa Rica), da servicio a tres comunidades vecinas en donde viven jóvenes vulnerables que corren el riesgo de incorporarse a bandas delictivas y actividades vinculadas con las drogas. A estos jóvenes les afectan los problemas medioambientales como la contaminación de los cursos fluviales y la falta de una red pública de tuberías. Aproximadamente el 50% de la población tiene menos de 40 años de edad y la tasa de abandono escolar alcanza el 54 %.

Este parque, creado en 2007 por iniciativa del Ministerio de Cultura y Juventud, proporciona acceso a actividades culturales y recreativas, a la tecnología y un entorno limpio, y brinda oportunidades de capacitación técnica y de otra índole, con el objetivo de promover el cambio social, económico y ambiental por parte de la población local, en estrecho vínculo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Aumentar la acción en favor de la sostenibilidad

El Programa de Gestión y Educación Ambiental del (CEGEA) del parque fue nominado para el Premio UNESCO-Japón de EDS en 2018. La UNESCO promueve la EDS mediante el Programa de Acción Mundial, que gracias a iniciativas como la del parque pretende generar y ampliar la acción con miras a acelerar el avance en favor del desarrollo sostenible.

Los tres objetivos fundamentales de esta iniciativa son:

  • rehabilitar y reforestar al menos 5.000 metros de áreas verdes;
  • crear senderos a través del parque para utilizarlos durante las visitas educativas; y   
  • reforzar los valores de la sostenibilidad al apoyar a tres comunidades mediante programas educativos y sociales.

Dora María Sequeira Picado, Directora Ejecutiva del Parque La Libertad, afirmó: “Atraemos a las 265.000 personas de tres cantones que viven en condiciones de pobreza. Constatamos cómo la pobreza y la exclusión, en particular, mantienen a los jóvenes con los ojos vendados de modo que no logran vislumbrar cómo avanzar de manera positiva. Al abandonar sus escuelas, minan sus propias posibilidades y su futuro, algo que los hace más proclives a incorporarse a las bandas de narcotraficantes y otras actividades delictivas, como si fueran las únicas actividades disponibles. La misión del parque es justamente proporcionar una gama de oportunidades que contrarreste el llamado de la calle y el uso y tráfico de drogas, y pueda conducirlos a la inclusión social y el desarrollo personal.

Estas comunidades amenazadas tienen también múltiples problemas ambientales y sanitarios vinculados con la eliminación de desechos y el suministro de agua limpia.

“Quisiéramos proporcionar a niños y adultos otras oportunidades de capacitación que les permitan encontrar empleos que garanticen una vida digna y, al mismo tiempo, promuevan la utilización sostenible e inteligente de los recursos naturales", afirmó Dora. “Hemos iniciado proyectos de superación con personas de estas comunidades, como la alfabetización y educación con miras a sensibilizarlas sobre las cuestiones relativas al medioambiente, a la vez que desarrollamos un programa de educación para el desarrollo sostenible en las escuelas, como parte de los planes pedagógicos científicos en tercer y cuarto grados. Los niños que no asisten a la escuela pueden incorporarse al movimiento de exploradores (Scout) que también refuerza lo que pretendemos con nuestro programa escolar e involucra a los padres.”

El joven scout Anthony Rojas, de 14 años de edad afirmó que: “Hace unos años no tenía realmente conciencia de nada en lo relativo a la gestión de los desechos o el cuidado del medioambiente. Cuando me incorporé al movimiento, comencé a aprender y me sentí dichoso de ser parte del cambio: reciclar, plantar árboles y, en general, cuidar como es debido de mi comunidad y la naturaleza.”

Proporcionar competencias técnicas y humanas para el empleo

Entre las actividades concebidas especialmente para atraer a los jóvenes figuran deportes urbanos como el parkour y el patinaje, combinados con cursos de fotografía y de diseño gráfico, que proporcionan competencias técnicas y humanas de cara al empleo con miras a contrarrestar las situaciones de riesgo.

Los desafíos para las mujeres de estas comunidades son diferentes, ya que no solo padecen la pobreza, sino que están expuestas a altos niveles de violencia doméstica.

“Muchas de las mujeres que visitan el parque no solo no saben leer, sino que también están atrapadas, por razones económicas, en situaciones de violencia. Las empoderamos para que puedan romper el ciclo de la pobreza y la violencia, y les proporcionamos capacidades empresariales, tales como alfabetización digital o artesanía para que puedan encontrar trabajo o mejorar de situación de sus empleos actuales", afirma Dora.

“Tratamos de transmitir un mensaje de desarrollo sostenible mediante el aprendizaje práctico que será determinante para las personas. Por ejemplo, cuando las mujeres aprenden trabajos manuales utilizamos materiales reciclados y les hablamos de la importancia de no arrojar desperdicios a los ríos o traemos objetos confeccionados a partir de maderas o plásticos reciclados.”

Ana Lupita Ureña, una residente de la comunidad vecina de Patarrá, trabaja como facilitadora de un taller de artesanía ecológica.

“Trabajé diferentes formas de artesanía durante muchos años y hace 8 años que me incorporé al Centro Medioambiental del Parque La Libertad y desde entonces mi vida ha dado un vuelco por completo. Gracias a los cursos de alfabetización digital, reciclaje y otros cursos de capacitación, adquirí nuevos conocimientos que me ayudaron a crear un nuevo nicho de artesanías ecológicas mientras compartía la importancia del reciclaje en aras de la preservación de la naturaleza. Ser facilitadora no solo me ha permitido contribuir a los ingresos de mi hogar, sino que me ha dado también la oportunidad de mejorar mi vida personal y familiar.”

Fomentando la biodiversidad

El parque en sí ofrece una rica biodiversidad y lleva a cabo un trabajo continuo para que sea realmente sostenible. Incluye jardines diseñados para atraer a especies nativas de abejas, mariposas y colibríes.

“Cuando comenzamos el programa, empezamos a trabajar con el departamento de historia natural del Museo Nacional para estudiar la flora y la fauna de las zonas aledañas, con miras a determinar qué debíamos sembrar y cultivar en el parque. Además, tras un recuento inicial identificamos 87 especies de aves,” explica Dora.

El parque tiene ahora 100 variedades de aves diferentes, de las cuales algunas son migratorias, otras autóctonas, y todas hermanadas bajo la etiqueta BirdSleuth de ornitología de la Universidad de Cornell, con sede en Estados Unidos. Es también el hogar de zorros plateados, mapaches y serpientes, y los visitantes de todas las edades participan en caminatas educativas para aprender más sobre estos animales.

“Lo interesante es que estamos viendo que hay aves que no son comunes en esta área, y por eso tenemos que averiguar si se sienten atraídas por la comida extra y el refugio que les brindan los árboles o si es el cambio climático la razón por la que se están desplazando hacia tierras más altas en vez de hacia las regiones costeras a donde iban de costumbre”, afirmó Dora.

Entre los planes futuros de recaudación de fondos para que el parque sea más sostenible desde el punto de vista financiero figuran la realización de talleres por parte de otras instituciones gubernamentales con miras a intercambiar experiencias y prácticas idóneas en la enseñanza de la EDS.

“Además, necesitamos programas más ambiciosos para satisfacer las necesidades cada vez más crecientes de la población. No solo queremos que las personas salgan de la pobreza, sino que permanezcan fuera de ella para siempre. Y necesitamos también mejorar aún más las infraestructuras. Parte del proceso educativo consiste en proporcionar un espacio digno para que todos puedan aprender. Estamos enviando el mensaje de que, como ciudadanos y seres humanos, todos merecen espacios idóneos de vida y buenas condiciones de trabajo, pero hay que hacerlo con el corazón y esforzarse para lograr una vida decente para ustedes y sus familias", dijo Dora.