Un año después del inicio de la pandemia de COVID-19, casi la mitad de los educandos del mundo siguen afectados por el cierre parcial o total de las escuelas, y más de otros 100 millones de niños no alcanzarán el nivel mínimo en lectura, como consecuencia de la crisis sanitaria.
Dar prioridad a la recuperación de la educación es esencial para evitar una catástrofe generacional como quedó subrayado en la reunión ministerial de alto nivel en marzo de 2021.
La UNESCO apoya a los países en sus esfuerzos para mitigar el impacto del cierre de las escuelas, abordar el tema de las pérdidas de aprendizaje y adaptar sus sistemas educativos, especialmente para las comunidades más vulnerables y desfavorecidas.
Para movilizar y apoyar la continuación de la educación, la UNESCO estableció la Coalición Mundial para la Educación, que cuenta actualmente con más de 160 miembros que trabajan en tres temas centrales: género, conectividad y profesorado.
Impacto de la COVID-19 en la educación
Estudiantes y profesores comparten sus historias
Los estudiantes, profesores y padres de la Red de Escuelas Asociadas de la UNESCO comparten sus historias sobre cómo afrontar y continuar aprendiendo durante el confinamiento.