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El canto bizantino

   

Inscrito en 2019 (14.COM) en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad

© Hellenic Ministry of Culture and Sport, 2018

Arte vivo con más de 2.000 años de existencia, el canto bizantino es una práctica cultural importante y un sistema musical completo que forma parte de las tradiciones musicales comunes que se desarrollaron en el Imperio Bizantino. Al realzar y valorizar musicalmente los textos litúrgicos de la Iglesia Ortodoxa Griega, el canto bizantino ha quedado íntimamente ligado a la vida espiritual y al culto religioso. Este arte vocal se centra principalmente en la interpretación de los textos eclesiásticos y, presumiblemente, debe su existencia a la necesidad de dar a conocer el verbo, la palabra, el logos”, ya que cada componente de este elemento del patrimonio cultural vivo tiene por objeto difundir el mensaje sagrado. Transmitido auditiva y oralmente de generación en generación, el canto bizantino ha conservado sus principales características en el trascurso de los siglos. Es una música exclusivamente vocal y esencialmente monofónica, en la que los cantos están codificados en un sistema de ocho modos o tonos y en la que se utilizan diferentes estilos rítmicos para acentuar las sílabas de determinadas palabras de los textos litúrgicos que se quieren destacar. Aunque el arte del canto bizantino ha estado siempre vinculado a la voz masculina, en los conventos de monjas es corriente que muchas de éstas lo practiquen y también hay mujeres que ofician de cantoras en algunas parroquias. El canto bizantino es un arte floreciente porque, además de ser transmitido en el seno de la Iglesia Ortodoxa Griega, cuenta con el apoyo ferviente de numerosos expertos y aficionados –músicos, coristas, compositores, musicólogos y universitarios– que se dedican a promover el estudio, la representación y la difusión de este elemento del patrimonio cultural vivo.

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