Asistencia técnica para la Condición del Artista
La Convención de 2005 sobre la Protección y la Promoción de la Diversidad de las Expresiones Culturales reconoce el papel central de los artistas en la creación y producción de una diversidad de expresiones culturales. Como parte del apoyo de la UNESCO para la aplicación de la Convención, se puede proporcionar asistencia técnica a los países que deseen desarrollar una legislación relativa a la condición del artista. Esta asistencia se basa en otro instrumento normativo internacional relevante, a saber, la Recomendación de 1980 relativa a la Condición del Artista. Principalmente consiste en apoyar un proceso de consulta participativo y de múltiples partes interesadas para recoger las visiones y prioridades de los actores gubernamentales en el ámbito de la cultura, el trabajo, los asuntos sociales, la educación, las finanzas, etc., así como de los actores de la comunidad artística. También pretende facilitar la organización de la información recolectada con el fin de proporcionar aportaciones consolidadas para la elaboración del proyecto de ley.
Hasta el momento, solamente Mauricio se ha beneficiado de este apoyo especializado. La UNESCO ayudó a este país durante el año 2017 para que desarrollara una ley relativa a la condición del artista con vistas a promover y proteger mejor los derechos económicos y sociales de los artistas y también a consolidar las plataformas para la cooperación interministerial.
La asistencia proporcionada facilitó la apertura de espacios de diálogo entre actores gubernamentales y no gubernamentales y esto resultó en una mayor concienciación, en particular a nivel institucional, de la necesidad de mejorar la condición socioeconómica del artista con vistas a su profesionalización como condición previa al desarrollo de las industrias culturales y creativas de Mauricio. Los intensos intercambios que se produjeron durante los distintos talleres temáticos también proporcionaron a los artistas una mayor comprensión de la legislación existente así como del grado de adaptabilidad a sus condiciones específicas de trabajo y empleo.
Además del alto grado de conciencia pública y de cooperación intersectorial, el resultado más tangible del proceso hasta el momento ha sido la consolidación de una serie de medidas y disposiciones que los ministerios correspondientes tendrán en cuenta para la elaboración de futura ley. Esto incluye una tarjeta profesional que establece la condición laboral del artista —profesionales independientes, trabajadores autónomos o profesionales con una relación cuasi-laboral—, medidas adicionales de seguridad social, medidas fiscales y normativas en los ámbitos de la creatividad, la educación y la formación. El texto propuesto también establece un organismo nacional para promocionar la creatividad de los artistas y proporcionarles servicios de orientación vocacional.
Solamente en Mauricio, 36 sesiones de trabajo y 300 participantes
Compromiso por parte del Primer Ministro para establecer un Fondo Nacional de las Arte con una asignación inicial de 50 millones de Rupias —equivalente a 1,5 millones de dólares—.
Se recogieron aportaciones de las partes interesadas —los Ministerios e instituciones correspondientes y los artistas— sobre el proyecto de ley relativa a la condición del artista. Se crearon grupos temáticos. El facilitador de la UNESCO presentó mejores prácticas del resto del mundo y dejó que fueran los interesados los que identificaran las prioridades y examinaran y eligieran las medidas que consideraban aceptables y factibles para Mauricio.
Se celebraron seis talleres de los grupos temáticos sobre la definición de las distintas categorías de los profesionales del arte: condición laboral, seguridad social y medidas normativas para apoyar la creación artística en la cultura, la educación, la formación y el comercio. En cada taller se presentó una propuesta preliminar de las medidas y disposiciones que resultaron de las consultas llevadas a cabo durante la primera misión en febrero. Los talleres tenían dos objetivos: verificar si las propuestas reflejaban las necesidades expresadas por los artistas a los que se consultó, y si eran compatibles con los esquemas existentes —que podrían extenderse a los artistas— o si precisaban de medidas específicas o incluso modificaciones de las leyes existentes.
Como resultado de las sesiones de trabajo de los grupos temáticos y las reuniones con los Ministerios correspondientes, la UNESCO con el apoyo del experto facilitador formuló un proyecto consolidado de disposiciones y medidas para ser consideradas en la elaboración de la futura ley, sobre las cuales es necesario llevar a cabo una ronda de consultas públicas y ministeriales para garantizar las responsabilidades y el sentimiento de inclusión tanto entorno al proceso y como a su resultado final.