<
 
 
 
 
×
>
You are viewing an archived web page, collected at the request of United Nations Educational, Scientific and Cultural Organization (UNESCO) using Archive-It. This page was captured on 08:23:28 Jun 25, 2022, and is part of the UNESCO collection. The information on this web page may be out of date. See All versions of this archived page.
Loading media information hide

Construir la paz en la mente de los hombres y de las mujeres

Gran angular

Las múltiples vidas de la “generación slasher” en China

cou_02_21_wide_angle_chine_website.jpg

Una obra reciente de Mo Guiling inspirada por la serie de dibujos animados Bob Esponja

Urbanitas, instruidos y compenetrados con las tecnologías digitales, los jóvenes de la “generación slasher” no vacilan, a diferencia de sus mayores, en multiplicar sus actividades profesionales y guiarse por sus aficiones personales, y se inician a través de las redes sociales en prácticas tan diversas como el estilismo, el hip-hop o la pintura.  

Zhang Yiwu
Escritor, crítico literario y profesor de literatura china en la Universidad de Beijing. Su última obra, publicada en 2016, se titula Strict and Honest Spirit: The Profound Force of Chinese Spirit [Espíritu estricto y honesto – La profunda fuerza del espíritu chino].

Zhang Lijia, una joven de 26 años de la provincia de Anhui, obtuvo un título de estilista y se dedicó a trabajos muy diversos. Fue modelo de productos de belleza, imagen de una marca, recepcionista y mecanógrafa de inglés. Esta joven artista es hoy una conocida influencer que cuenta con seis millones de seguidores en la plataforma de vídeos cortos Douyin, la versión china de la aplicación TikTok, en la que presenta sus talentos de muralista. 

Cuando empezó a difundir vídeos en esa plataforma, Zhang Lijia tan sólo pretendía mostrar cómo realizaba sus pinturas murales, pero su creciente popularidad cambió todo: la artista se hace llamar ahora Muralista Jiajia y se dedica a tiempo completo a la realización y difusión en directo de sus obras y a la interacción con sus fans. 

El caso de Jiajia es representativo de la Generación Z china. Nacidos entre 1996-2010, los zoomers, como se les denomina a veces, son hijos de la era digital. En muchos aspectos, su vida es reflejo del enorme auge registrado por Internet en China durante los dos últimos decenios.

Para los jóvenes de esa generación, las redes sociales son el medio principal de comunicación, entretenimiento e información que puede conducirles a carreras profesionales muy lucrativas. En diciembre de 2020, el total de vídeos sobre arte visionados en Douyin se cifró en 2,1 billones, o sea un número 300.000 veces superior al de las visitas realizadas en 2019 al “Metropolitan Museum of Art” de Nueva York.

Rock, hip-hop y cerámica

El rock, el hip-hop, el arte de la cerámica o las comedias musicales son algunas de las múltiples actividades que incitan a millones de fans entusiastas a frecuentar las redes sociales de plataformas como Douyin, Bilibili, Xiaohongshu y “WeChat”.

En China, son cada vez más numerosos los jóvenes que, al igual que Jiajia, están dispuestos a realizar varios trabajos y optan por ganarse la vida como autónomos con ocupaciones múltiples e identidades profesionales diferentes. Conocida como “generación slasher” (término creado en 2007 por Marci Alboher, cronista del New York Times, y popularizado en China por la escritora Susan Kuang en 2016 en su libro Slasher Generation) esta expresión designa a las personas deseosas de asumir múltiples identidades profesionales y que utilizan frecuentemente el signo barra inclinada (/) -llamado slash en inglés-, para enumerar sus diferentes ocupaciones.

Criados en una época de desarrollo económico excepcional de China, esta generación ejemplifica un importante cambio de mentalidad cultural con respecto a los de generaciones anteriores. Para ella, la independencia, la flexibilidad de horarios, la creatividad y el espíritu emprendedor son más atractivos que una trayectoria profesional convencional considerada ideal por sus antecesores, esto es, un puesto de trabajo fijo y estable en una oficina y con prestaciones sociales.

Según un informe de 2019 de la agencia de prensa estatal Xinhua, en China hay más de 80 millones de slashers y es previsible que aumente. La mayoría son jóvenes instruidos de medios urbanos, abiertos al mundo y muy familiarizados con el uso de las nuevas tecnologías, lo que les permite tener más opciones en la vida. Su modo de vida se ha popularizado tanto que en 2019 un centro comercial de lujo de Xi’an organizó un festival especialmente dedicado a ellos.

El auge del guochao

Un típico ejemplo de la generación slasher es Mo Guiling, un joven fotógrafo independiente titulado en comunicación visual. Dedica buena parte del tiempo a plasmar en videos escenificaciones de ideas que le vienen a la cabeza. Por ejemplo, empapelar todas las paredes de su habitación con periódicos o hacer imitaciones de Míster Bean, el protagonista de la serie televisada británica de los años noventa, encarnado por el actor cómico Rowan Atkinson.

El primer vídeo de Mo se hizo viral en la aplicación Douyin y recibió 2,2 millones de “me gusta”. Este éxito le alentó a concebir más relatos visuales sobre su vida personal y elementos de la cultura popular, como dibujos animados japoneses y películas estadounidenses. Sus vídeos y fotografías imaginativas, además de ser hilarantes, invitan a los espectadores a reflexionar.

Otros slashers están contribuyendo a revitalizar el patrimonio cultural tradicional. Uno de los principales factores cada vez más importante en la cultura de consumo en todo el país es el guochao (literalmente “estilo chino”), que se está imponiendo en el ámbito de la moda con indumentarias retro y contemporáneas, diseñadas por marcas chinas que hacen la competencia a las firmas internacionales del sector.

El guochao ha contribuido a impulsar a la vez las marcas y la industria de la moda chinas.

Una cítara bimilenaria

Motivados por la riqueza de su patrimonio cultural, los jóvenes zoomers e influencers chinos siempre están dispuestos a promoverla por doquier. Tenemos, por ejemplo, el caso de Peng Jingxuan, una joven natural de Wuhan que desde 2017 vive en Francia, donde cursa estudios en la Universidad de Burdeos-Montaigne para obtener un máster en musicología.

Consciente de que la música tradicional china se conoce escasamente en el extranjero, se empeñó en dar a conocer el instrumento de cuerda pulsada llamado guzheng, una gran cítara con más de 2.000 años de antigüedad, usada desde los tiempos de la dinastía Qin.

Engalanada con el traje tradicional de las mujeres de la etnia han, Peng empezó a tocar el guzheng ante la sede de la ópera de Burdeos, el Gran Teatro. Grabó sus interpretaciones y ahora viaja con el guzheng por sitios muy diversos, tocando hoy al pie de la torre Eiffel, mañana a orillas del lago Leman y al día siguiente en una mansión histórica francesa durante una ceremonia nupcial.

Peng cuenta ya con más de 7,7 millones de seguidores en Douyin. En abril de 2020 declaró al noticiero digital China Daily que “cuando la gente aplaudía al final de sus conciertos, siempre le invadía un sentimiento de orgullo nacional”.

Conectados con todo el planeta mediante Internet, los jóvenes de la Generación Z china se muestran cada vez más abiertos y accesibles a los demás. A menudo han viajado mucho. Al igual que sus homólogos de otras partes del mundo, les preocupan el estado del medio ambiente, los riesgos del cambio climático, la situación de las poblaciones vulnerables y el bienestar de los animales. Partidarios de un cambio social, participan activamente en las actividades de las comunidades y con frecuencia realizan trabajos voluntarios. El creciente interés en China por la cultura tradicional y los cambios en el modo de vida muestran que la voz de los slashers se está escuchando realmente. De hecho, su visión de una sociedad más diversa se impondrá sin duda alguna en el futuro.

 

Lecturas complementarias:

Himalaya FM en China: la radio a la carta, El Correo de la UNESCO, enero-marzo de 2020

‘Nüshu’: lágrimas al sol, El Correo de la UNESCO, enero-marzo de 2018

No hay otra alternativa, El Correo de la UNESCO, julio-septiembre de 2011

Zoomers, en sus propias palabrasEl Correo de la UNESCO, abril-junio de 2021

 

Suscríbase para descubrir los temas de actualidad de El Correo. La suscripción a la versión digital es totalmente gratuita.

Síganos en TwitterFacebookInstagram.