Este 4 de julio del 2019, un evento especial consagrado al tema  Qhapaq Ñan: experiencias compartidas y buenas prácticasreunió a los representantes de Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador y Perú con el propósito de dar a conocer a la comunidad Patrimonio  Mundial los logros en materia de cooperación en favor de la gestión y conservación de este bien cultural seriado y transfronterizo. 

En particular, se presentaron los concretos e importantes resultados logrados al término de la implementación del proyecto extrapresupuestario financiado por el Fondo Fiduciario UNESCO/Japón para la Preservación del Patrimonio Mundial Cultural. Este evento de especial relevancia tuvo lugar dentro del marco de las actividades de la 43ª reunión del Comité del Patrimonio Mundial, reunido del 30 de junio al 10 de julio 2019 en Bakú, Azerbaiyán. 

Inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial en 2014, el sitio se trata del ejemplo más representativo y excepcional de una vasta red viaria que abarcaba unos 30.000 kilómetros. Este extraordinario sistema de caminos se extiende por una de las zonas geográficas del mundo de mayores contrastes, desde las cumbres nevadas de los Andes que se yerguen a más de 6.000 metros de altitud hasta la costa del Pacífico, pasando por bosques tropicales húmedos, valles fértiles y desiertos de aridez absoluta. La red viaria alcanzó su máxima expansión en el siglo XV, llegando a extenderse por todo lo largo y ancho de la cordillera andina.

El Qhapaq Ñan, Sistema Vial Andino consta de 273 componentes y se extiende a lo largo de más de 6.000 kilómetros, una selección que pone de relieve la importante función social y política de la red viaria, las obras maestras de arquitectura e ingeniería y las infraestructuras conexas dedicadas a las actividades mercantiles, el alojamiento y el almacenamiento de mercancías, así que los sitios con un significado religioso.

Para el evento especial, los representantes de las seis Secretarias Técnicas del Qhapaq Ñan tuvieron la oportunidad de ilustrar la diversidad y el valor excepcional de este bien, así como de dar cuenta de los resultados, actividades, logros, dificultades y oportunidades acontecidos durante los últimos años en la implementación del proyecto apoyado por Japón. El papel fundamental desempeñado por las comunidades locales en los procesos de toma de decisiones, conservación, valorización y uso continuo del Qhapaq Ñan fue un aspecto único y preeminente reiterado a lo largo del evento.

La audiencia compuesta de representantes designados de diversos Estados Partes, organizaciones de la sociedad civil, ONGs, expertos y estudiantes de patrimonio pudo presenciar la complejidad del bien, los esfuerzos de valorización, y entender mejor las perspectivas futuras previstas para seguir consolidando los esfuerzos en favor de su conservación y gestión. La continuidad y el fortalecimiento de la cooperación regional fue subrayada con especial énfasis, así como la voluntad conjunta de los seis Estados participantes de continuar con esta iniciativa colectiva a la espera de nuevas posibilidades de apoyo internacional.